domingo, 26 de abril de 2015

Gigantesca erupción en el sur de Chile

Una inesperada y sorprendente erupción tuvo el miércoles el volcán Calbuco, a unos mil kilómetros al sur de Santiago de Chile, lo que obligó a las autoridades a ordenar la evacuación preventiva de más de 4.000 personas que viven en un radio de 20 kilómetros. Después de una serie de temblores, la primera explosión se produjo a las 17.50 hora local y provocó una columna de humo de unos 17 kilómetros de alto, con una forma similar a un hongo atómico. El Gobierno decretó la alerta roja total, que significa que el proceso eruptivo en curso implica una "alta amenaza para la población".
La madrugada del jueves se produjo un segundo estallido. Aunque el volcán no ha desprendido lava, pequeñas localidades de los alrededores sufren una lluvia de cenizas y mala calidad del aire. Ensenada, un pueblo cercano al Calbuco, tiene aproximadamente cuarenta centímetros de material piroclástico, una densa capa de piedras y arena que incluso han destruido algunos techos de las casas. La nube de humo incluso ha llegado a ciudades como Temuco, la capital regional ubicada a 355 kilómetros de la zona de explosión. Dada la emergencia, el Gobierno chileno determinó el Estado de Excepción en la provincia de Llanquihue y la comuna de Puerto Octay y, según informó la Presidenta Michelle Bachelet, se declaró alerta sanitaria en torno a la zona de evacuación.
Volcán Calbuco
El director nacional del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), Rodrigo Álvarez, indicó que no es posible descartar una nueva erupción en las próximas horas, ya que este volcán libera energía con rapidez. Aunque no han podido sobrevolar todavía el cráter, las autoridades insistieron en la necesidad de evacuar la zona y utilizar los albergues habilitados, pese a la resistencia de algunos habitantes de abandonar sus fincas y sus animales. “La evacuación es obligatoria, porque lo que pretendemos es proteger a las personas”, indicó Bachelet antes de viajar a la zona la mañana del jueves y sostener reuniones con los equipos de emergencia.
El viento noreste llevó las cenizas hacia las zonas de Bariloche, San Martín de los Andes y Villa La Angostura, en el sur de Argentina. “Existe una pequeña capa sobre los autos y asfalto”, señaló la intendenta de San Carlos de Bariloche, María Eugenia Martini, a CNN Chile. En esta localidad las clases se suspendieron, el Aeropuerto Internacional Teniente Luis Candelaria fue cerrado de manera temporal, pero el transporte funciona con normalidad, no hay personas evacuadas y que el suministro del agua y luz no ha presentado dificultades.
La erupción no ha provocado muertes, la única persona desaparecida fue encontrada la tarde del jueves, pero todavía resulta prematuro determinar la cantidad de damnificados, por lo que la presidenta Bachelet indicó que no es posible cuantificar el costo económico exacto de la emergencia.
El Calbuco, uno de los tres volcanes más peligrosos de los 90 activos que tiene Chile, había permanecido 43 años inactivo: su última erupción se registró en 1972, aunque fue de baja intensidad. La región donde se halla es conocida por ser uno de los principales focos turísticos nacionales, visitado por chilenos y extranjeros justamente por estar rodeado de montañas y lagos.

Un potente seísmo causa más de 1.800 muertos en Nepal

Más de 1.800 personas han muerto, casi 5.000 se encuentran heridas y un patrimonio cultural incalculable ha quedado destrozado en el terremoto de 7,9 grados en la escala Richter que este sábado ha sacudido Nepal, según las últimas estimaciones oficiales, citadas por la agencia Reuters. Se trata de la peor catástrofe natural que ha padecido este país desde 1934, cuando otro seísmo dejó cerca de 8.500 muertos.
El seísmo, que tuvo su epicentro a 150 kilómetros al oeste de Katmandú, afectó también a la India, donde se registraron más de treinta víctimas mortales, y en Tíbet, donde las autoridades chinas informaron de la muerte de al menos una docena de personas. También causó una avalancha en el Everest que ha causado la muerte a más de diez montañeros, aunque algunos medios locales suben la cifra a 18.
Mapa del terremono en Nepal
En la capital nepalí, donde se han derrumbado numerosos edificios, millares de personas han optado por pasar la noche al raso, pese a la lluvia que cae esta noche sobre la ciudad. Aproximadamente la mitad de las víctimas mortales confirmadas hasta el momento fallecieron en el valle de Katmandú, una de las zonas más densamente pobladas del Nepal. Más de una veintena de réplicas han sacudido el país tras el primer movimiento telúrico. Según ha indicado el ministro de Finanzas nepalí en Twitter, en la zona del epicentro, en Barpak Larpak, “un 90% de aproximadamente un millar de casas y cabañas han quedado destruidas”.
Los hospitales del país, de 28 millones de habitantes y uno de los más pobres del mundo, se encuentran completamente saturados y no dejan de lanzar llamamientos para solicitar donaciones de sangre. Las tareas de rescate y auxilio se ven dificultadas por los daños sufridos en las comunicaciones y la red eléctrica del país, ya de por sí insuficiente. El Gobierno nepalí ha advertido que el seísmo puede incrementar los cortes de luz que ya padecen normalmente los ciudadanos.
Numerosos monumentos en esta capital de enorme riqueza histórica se han derrumbado por el terremoto. Imágenes distribuidas por testigos presenciales a través de internet muestran tesoros como la plaza de Pathan Durbar, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, en la que sus antiguos templos hindúes de madera se han derrumbado. De la torre Dharara, del siglo XIX, uno de los símbolos de Kathmandú y de 62 metros de altura, apenas queda un muñón. El monumento, al que se podía subir desde hace una década para admirar las vistas de la ciudad, se desplomó causando la muerte a decenas de personas. Cerca de 200 personas habían comprado este sábado boletos para visitarlo por dentro.
Según la página de información nepalí eKantipur.com, “monumentos históricos como la torre Dharhara y las plazas de Basantapur Durbar y Patan Durbar han quedado completamente destruidas”. El aeropuerto Thribhuvan de la capital, que cerró inicialmente como consecuencia del seísmo, volvió a la normalidad pocas horas más tarde.
El Gobierno nepalí ha declarado una crisis nacional y ha establecido un fondo de 500 millones de rupias nepalíes para la reconstrucción de infraestructuras. El primer ministro, Sushil Koirala, ha cancelado la visita oficial que efectuaba a Indonesia y ha instado a los ciudadanos a asistir en la medida de sus posibilidades en las tareas de rescate.
Numerosos países han ofrecido ayuda: el primero en llegar fue sido un avión militar Hércules indio, que transportaba 3,5 toneladas de medicinas y material de asistencia y un equipo de 40 personas expertas en tareas de auxilio. Nueva Delhi tenía previsto enviar también un hospital móvil, entre otra
El Gobierno español ha expresado su consternación por el terremoto y ha transmitido sus condolencias a los familiares de las víctimas y las autoridades de los países afectados. En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores indica que el Ejecutivo transmite su “solidaridad” y “cercanía máxima con el pueblo” nepalí, informa Efe y asegura que de momento no hay víctimas españolas.
El seísmo representa un duro golpe para Nepal en momentos difíciles. El país, encajado entre India y China y sobre algunas de las montañas más altas del mundo, trata de superar la crisis causada por el asesinato de la mayor parte de la familia real en 2001 perpetrado por del príncipe heredero, Dipendra, antes de suicidarse. En 2008 la monarquía quedó abolida tras una rebelión maoísta.
El Gobierno actual ha tratado de diversificar su economía, dependiente del turismo y la agricultura, y ha ensayado un acercamiento hacia China, sin dejar atrás sus tradicionales lazos con India. Uno de los proyectos que acaricia para salir de su aislamiento es la posible construcción de una línea de tren que conecte al país con China a través de Tíbet.